Desde basura hasta cadáveres. A lo largo de la vía conocida como "el corredor de los pobres", que une las comunidades de Villa María y Villalobos, usted puede encontrar de todo un poco, debido a personas inconscientes que la han tomado como un vertedero más.
Sólo bastó un pequeño recorrido para comprobarlo, al menos cinco "pataconcitos" decoraban la orilla de la calle, que en las noches se convierte en una "boca de lobos". Y es precisamente la falta de luminarias lo que encubre hasta a los homicidas, quienes en numerosas ocasiones han abandonado cadáveres que luego han sido encontrados cuando sale el sol.
Justo en el momento en que DIAaDIA estaba por el lugar, observó in fraganti a un hombre que bajaba montones de ramas de árboles de un vehículo, él conducía un camión con matrícula 565215.
HAY TRES EN LA MIRA
Pero "la tapa del coco" fue el pasado sábado, cuando unos 30 tanques, 22 de ellos con acetato de propileno, fueron arrojados también a orillas de la calle, lo que provocó que un grupo de personas resultara con afectaciones respiratorias.
Según explicó Pablo Tuñón, jefe del Cuerpo de Bomberos de Panamá, hay tres empresas involucradas en este caso y que este material se utiliza para procesar plásticos y mezclar pinturas, pero peor aún, es tóxico, inflamable y explosivo.
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