Aunque los mismos residentes del lugar reúnen dinero y material para rellenar provisionalmente con cemento y piedras, esta solución dura muy poco, pues el constante tráfico de automóviles, buses y chivas, hacen que se deteriore rápidamente. Sumado a ello, esta vía no cuenta con aceras, por lo que la gente se tiene que tirar a las profundas y sucias cunetas para caminar.

Vecinos y transportistas hacen un llamado a las autoridades del MOP, para que vayan a solucionar el problema, que ya lleva más de un año.