Solitos cavaron su tumba. El mensajero y el contador de la Financiera Solidaria, en complicidad con un civil, habían denunciado un robo a mano armada, pero los ladrones resultaron ser ellos mismos.
El jefe de investigaciones criminales de la PTJ explicó que el mensajero denunció el 3 de marzo, que cuando iba a realizar un depósito de 20 mil dólares al banco el auto suyo había sido interceptado por dos sujetos que lo despojaron del dinero.
Las investigaciones revelaron que lo que hicieron fue un autorobo. Los tres están detenidos. Se recuperaron 6 mil dólares.
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