Un grupo de indígenas ngöbe buglés llegaron ayer a la ciudad capital después de haber recorrido durante 10 días los diferentes lugares para dar a conocer su lucha en contra de la minería y creación de hidroeléctricas en sus territorios.
Los indígenas traían en sus manos una petición firmada por 7 mil habitantes para que el Gobierno les dé una solución en 30 días, de lo contrario se tomarán las calles, porque alegan no temerle a la "ley carcelazo".
|