Peligro. Una rampa para personas con discapacidad fue construida en la Escuela El Mirador de San Miguelito, lo que ha sido una buena idea del Ministerio de Educación (MEDUCA). Sin embargo, se ha convertido en un problema, pues la empresa constructora picó los canes del techo, pero no los repelló, por lo que se caen pedazo a pedazo.
La directora del plantel, Genoveva Naranjo, denunció que hace una semana una parte bastante grande del cemento se desprendió y un estudiante iba pasando. Afortunadamente, el menor pudo esquivarlo, pero temen que vuelva a suceder y no corran con suerte.
Otro problema es la falta del vital líquido, lo que ha obligado a que los estudiantes lleven el agua desde su casa. La recolección de la basura es otro dolor de cabeza en esta comunidad educativa.
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